Muy cercana a la bahía de Santander se encuentra la Calle Isabel II que se extiende desde la Plaza de la Esperanza, en su confluencia con la calle del Cubo hasta el comienzo de la calle Castilla, en el Puerto, comunicando este con el centro urbano. Los orígenes de esta calle se remontan a la época en que el Ayuntamiento de Santander incautó la huerta y el convento de San Francisco por la Ley de Desamortización de Mendizábal y adoptó el proyecto de abrir una calle de sur a norte junto a la antigua muralla, que partiendo de la puerta de San Fernando terminase en la de Los Remedios.
En 1830 se dictó una sentencia por la cual se autorizaba la utilización del cementerio del convento de San Francisco y el camposanto; fue convertido en calle. Posteriormente, al excavar los cimientos de un nuevo edificio se descubrieron varias sepulturas de finales del siglo XVIII, entre ellas la del primer arquitecto oficial de Santander, don José de Alday Fernández.
El nombre de Isabel II se le dió a esta calle en el año 1838, debido a la Reina Isabel II que por aquella época veraneaba en el paraninfo de la Magdalena.
Autor: Jorge Grijuela
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